Mujeres al Poder: La Alianza que sacude el panorama político en Risaralda.
Movimientos en el "Ajedrez Político" de Risaralda.
Mujeres al Poder: La Alianza que Sacude el Panorama Político en Risaralda
Aún falta más de un año para las elecciones al Congreso de 2026, pero en Pereira y Risaralda ya se sienten los movimientos estratégicos de los principales actores políticos. Una alianza que ha llamado la atención es la que se gesta entre María Irma Noreña, esposa de Mauricio Salazar, y la experimentada líder Juliana Enciso.
¿En qué consiste la alianza?
María Irma Noreña, quien ha sido el rostro político de la familia Salazar Noreña, ha anunciado su aspiración al Senado de la República por el Partido de la U. Su candidatura al Congreso no llegaría sola, pues para nadie es un secreto que la mayoría de su equipo estará también con una "hija de la casa", una ficha joven y sin trayectoria política: Franyela Bermúdez, quien buscará un escaño en la Cámara de Representantes con el apoyo del poder local que ostenta el equipo de Gobierno.
Pero el giro clave en este ajedrez político lo da Juliana Enciso, una figura de peso en la política Risaraldense que en las pasadas elecciones a la Gobernación de Risaralda logró cerca de 100 mil votos. Aunque inicialmente se especulaba que buscaría su propio camino al Senado, Enciso ha decidido sumarse como Jefe de Debate a la campaña de María Irma Noreña al Senado y de Franyela Bermúdez a la Cámara.
¿Estrategia o conveniencia?
El respaldo de Juliana Enciso a esta dupla refuerza la estructura política que buscan consolidar los Salazar Noreña desde la Alcaldía de Pereira. La pregunta es: ¿Es esta una alianza sólida y con proyección real, o una estrategia momentánea para capitalizar el poder local en las elecciones de 2026?
El movimiento ha despertado diversas reacciones en los círculos políticos y ciudadanos. Mientras algunos ven en esta alianza un intento legítimo de fortalecer la representación femenina en el Congreso, otros opinan diferente.
¿Un compromiso a futuro?
Además del impacto inmediato de esta alianza, surge una pregunta clave: ¿Existe un acuerdo a largo plazo que comprometa a los Salazar Noreña a apoyar a Juliana Enciso en una futura aspiración a la Gobernación de Risaralda?
Más allá de los acuerdos entre liderazgos políticos, la última palabra la tienen los electores. ¿Consideran que esta alianza garantizará una representación efectiva en el Congreso? ¿Ven viable la fórmula Noreña-Bermúdez como un proyecto ganador?
Lo cierto es que el tablero político de Risaralda se sigue moviendo, y con más de un año por delante, las estrategias, alianzas y posibles candidaturas seguirán transformando el panorama.